“Vamos a trabajar sin amigos ni enemigos”, proclama el nuevo jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel Castro Castillo. 26 de junio de 2013 |
—Hola Simon, no fue a mí que tú
me dedicaste la cancioncita esa de Silvio, la que dice: el tiempo pasa nos
vamos poniendo viejos… porque no es a mí que usté me está diciendo vieja
¿verdad que no?
—Pero ven acá Ada, tú te crees
que naciste pa semilla.
—Mire lo que le voy a decir, Simón,
vieja es su abuela y usté y otra cosa, a mí no me compare contigo que tú eres más
viejo que yo.
—Vamos a dejar eso así, Ada. Y
la cancioncita esa no es de Silvio Rodríguez es de Pablo Milanés.
—Para mí es lo mismo, yo no viví
esa época de rebeldía.
—Gran vaina esa... viste quitaron
al jefe de la policía, yo te lo dije.
—Eso se veía venir, ah pero tú
te crees que esa presión mediática es fácil Simón… y esos actos delictivos
espectaculares, ¿te parecieron fortuitos?
—Ada tuta aprendiendo mucho
conmigo.
—Es que con esos análisis suyos Simón…
¿a ti te criaron en un laboratorio?
—Ay cañajo, ya deje la vaina, se
corrió.
—Ya, ya, déjalo así. Rebobinando
Ada, tú sabes que el mal no está en la sabana, aquí tenemos una delincuencia
real que maneja el poder.
—O un poder real que maneja la delincuencia,
querrás decir.
—Sí Ada es lo mismo atrás que en
la espalda. Eso no lo digo yo que se sepa para que no vaya a ser cosa de que
alguien nos esté oyendo y nos den un tapa boca.
—Pero eso lo sabe todo el mundo,
Simón, lo que pasa es que nadie sabe quiénes son esos poderosos ni quienes los
delincuentes y quienes lo saben no lo dicen.
—Sí pero esa es otra cosa, Ada, al
jefe de la policía no lo quitaron por eso, tú sabes que esos decretos se baten
mucho eso no es de un día pal otro como mucha gente cree ahí hay otras
motivaciones que ni usté ni yo la sabremos ni en cien años.
—Déjese de estar hablando pluma
e burro, Simón, que ese señor ya tenía su par de añitos y usté sabe muy bien que
los de atrás empujan pa fuera.
—Contrale Ada, tuta mortal hoy.
—Usté sabe bien Simón que la
delincuencia no se va acabar porque el problema es de educación, pobreza,
desigualdá, falta de empleo, desesperanza, aquí hay muchos males que se
prefieren tapar con los diferentes bochinches de politiquería a hacerles frente,
aquí un escándalo lo silencia otro escándalo y así no vamos a salir nunca a
camino.
—Tú me quieres decir que las
estadísticas delictivas son una percepción, que los que magnifican los actos
delictivos son los medios de comunicación.
—Sí usté quiere decir eso no lo
ponga en mi boca, que usté tiene la suya y yo tengo la mía. Es verdad que la
prensa juega un papel preponderante en la percepción de la gente pero yo creo
que aquí no estamos tan mal como parece. Y nuestro presidente…
—El suyo.
—Y el suyo también porque usté
no vive en Suiza. Ese presidente que nos gobierna lo ha hecho bien dentro de lo
que cabe con todas las dificultades que tienen que enfrentar los presidentes en
este batey. Usté sabe muy bien que los presidentes se deben a las fuerzas que
los montan ahí arriba, deje de estarse haciendo el bobo que gobernar este
pedacito de tierra no es fácil.
—Aló, aló, Ada, ya cálmate que
nadie está peleando, lo único que yo quería decirte es que al jefe de la policía
lo iban hacer saltar del cargo, eso no es motivo pa peliá.
—Ah sí, pues dejémoslo de ese
tamaño, hablamos luego.
—Ok bye.